Por Horacio Guzmán, estudiante de Ciencias de la Comunicación y participante en el programa de Empoderamiento y Conflictividad Social del Centro de Investigación y Formación Social del ITESO.
¿Qué piensan los universitarios de los movimientos sociales? ¿Están enterados o conocen alguno de ellos? ¿Han participado? Durante la campaña Con-Muévete, que se realizó del 17 al 28 de septiembre en el ITESO, distintas actividades acercaron a los itesianos a los nuevos movimientos sociales que se viven en Jalisco y México.
Ciclos de videos, conferencias, talleres y espacios de expresión fueron algunas de las actividades en la que la comunidad universitaria pudo acercarse a conocer las nuevas formas de participación ciudadana enmarcadas en los actuales movimientos sociales tanto locales y nacionales, como el #Yo Soy 132, Ciudad para Todos, GDL en Bici o el Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad, entre otros.
Para Oscar Limón, estudiante de Relaciones Internacionales quién asistió a la proyección de videos del movimiento #Yo Soy 132, “fue una oportunidad para mirar de manera sensible y profesional las acciones realizadas por los integrantes de dicho colectivo”.
Entre las actividades, una que llamó la atención fue el espacio designado para expresarse sobre los movimientos sociales y la democratización del espacio público en la Plaza de los 50 años, en el cual, algunas preguntas motivaron a los estudiantes a escribir sus opiniones en tres lonas blancas. Las respuestas fueron abundantes y variadas.
¿Para ti sirven de algo los movimientos sociales? “Sí, siempre y cuando lo hagan por la vía correcta, esto es, sin violar las leyes y sin recurrir a la violencia hacia terceros, cuando los empoderados actúan fuera del marco de la legalidad o justicia, los civiles tienen el derecho y la justificación de comunicar su inconformidad”, se lee en una de las mantas.
Otras de las preguntas expuestas fue ¿Cómo crees que se le pueda dar vida a la democracia mexicana?, a lo que alguien opinó “Dejando de creer que lo que necesitamos es un presidente al que le importe la gente y empezando a creer que necesitamos gente a la que le importe la gente. Si ellos (políticos) llevan décadas haciéndolo mal, no nos queda más que hacerlo nosotros bien”.
Durante las actividades era interesante ver por ejemplo, la asistencia de jóvenes que no tenían ni la más remota idea de lo que representan los movimientos sociales o su implicación en la vida pública, y tras enterarse, veían la importancia en participar y actuar como ciudadanos, en defensa de los derechos humanos, la democracia y la libertad. En ese sentido, la campaña cumplió con el objetivo de informar sensiblemente e invitar a la acción.
Para muchos fue como una forma de desnaturalizar lo evidente, problematizar cosas que parecieran normales, pero no lo son. Así, la participación e interés mostrados por los itesianos en las distintas actividades de la campaña, evidencian que los jóvenes no están exactamente conectados con el acontecer público diario, aunque esto no significa que estén apáticos a los problemas. Yo diría que están en un periodo de latencia, listos para reaccionar ante estímulos que los inviten a la acción social, como se pudo ver en las proyecciones de videos o en los múltiples comentarios escritos en las lonas.
En este sentido, Con-Muévete demostró que en el ITESO sí hay personas a las que les interesan las demás personas y el bien común, sólo se necesitan los espacios y los pretextos que inviten a la participación social.