Despierto y veo el color café de mi techo, me recuerda el café del bosque y el color de lo que fue mi bebida favorita por mucho tiempo, pienso y siento la melancolía del ayer y de lo que hubiera sido el mañana. Como extraño esa bella brisa y ese sentimiento de libertad en cada inicio de día.
Me veo a mí mismo tan solo y sin esperanza alguna de volver a salir, con que cara me volvería a ver el mundo después de lo que paso… estoy enterrado en mi propio destino y estancando en mis propias decisiones, ¿por qué parece que mi mente se eleva, pero mi cuerpo se deshace?
En ocasiones que cierro los ojos esperando no tener la oportunidad de volverlos a abrir… me concentro y vuelvo a oír esos lamentos de nuevo sobre mi… ¿Qué fue lo que tuve que haber hecho para acabar así…? Tal parece que se me volvió a subir el vivo y yo nunca podré salir de aquí.
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