Por Sandra Alvarado, estudiante de Ciencias de la Educación y Colaboradora del Programa de Derechos Humanos y Paz ITESO.
En su décima edición, el Festival Cultural Universitario y el Programa Institucional de Derechos Humanos y Paz, organizaron una mesa redonda titulada Imagen y Violencia, que se llevó a cabo el pasado viernes 26 de octubre.
La mesa redonda abordó los siguientes temas: arte, periodismo y educación. Las voces invitadas: el artista contemporáneo Artemio Narro, el fotoperiodista Humberto Muñiz y el académico Gerardo Pérez Viramontes, especialista en paz y conflictos.
El detonador de la charla fue la exposición del artista Artemio Narro, imágenes con las que se propone cambiar, desde el arte, el sentido social que tienen las armas. El primero en tomar la palabra fue Gerardo Pérez, para recordar que la realidad no es ni violenta ni pacifica en sí, sino objeto de interpretación desde una serie de parámetros. No existen ni la paz ni la violencia como tal, sino la forma de ver la realidad.
Enseguida de la participación de Gerardo Pérez, continuó Humberto Muñiz, quien presentó imágenes crudas y fuertes, resultado del trabajo de distintos periodistas.
Artemio Narro al tomar la palabra, afirmó que el hombre es violento por naturaleza y que en su obra trata de organizar una serie de armas en forma armónica y en equilibrio. Narro cree que el “crimen organizado” se instaló ya como concepto relacionado a la violencia de grupos delictivos y propone darle la vuelta al crimen organizado y ponerle traje y corbata, nombres y apellidos de empresarios e involucrados en puestos gubernamentales, parte del crimen organizado.
Después de la intervención de Artemio Narro, Gerardo Pérez realizó nuevamente una intervención para exponer que le pareció interesante la obra del artista, porque no conoce de armas y ver las armas presentadas de esa manera le hizo pensar en que en los instrumentos no son buenos ni malos, sino los fines para los que se utilizan. El académico se mostró en desacuerdo con la afirmación de Artemio Narro sobre que los seres humanos somos violentos por naturaleza. Enfatizó que a los seres humanos nos constituye la agresividad, un instinto para mantenernos en vida que puede ser utilizado de manera positiva o negativa. Utilizarlo de forma negativa sería con violencia. Apuntó que debemos erradicar esa concepción de que somos violentos por naturaleza, porque nos lleva a desarrollar más violencia.
Al final, se observa como los seres humanos somos seres abiertos a cualquier posibilidad de hacer paz o hacer violencia, del mismo modo que en una imagen podemos ver paz, violencia o ambas.
Todo realidad es siempre objeto de interpretación. La “objetividad” y la “verdad” pasan siempre por la rejilla de las formas de pensar y ver. Artemio Narro, desde su perspectiva como artista, trata de darle la vuelta a las imágenes de armas, buscando transmitir armonía. Su mensaje es algo así como: “a pesar de las armas y la destrucción que provocan, también podemos construir orden, armonía y belleza”. La interpretación, está en quien observa la obra de Artemio. Y yo digo: “una cosa se ver la violencia y pensar qué hacer con ella, desde la violencia; y otra cosa muy diferente es ver la violencia y preguntarse qué hacer con ella desde la paz”. La decisión está en nosotros.