La Operación Chamartín es un proyecto urbanístico cuyo objetivo es reconvertir el terreno ocupado por las vías del tren de la Estación de Chamartín en suelo urbanizable, en el distrito de Chamartín, Madrid. Ha sido calificada como la mayor operación urbanística de Europa. Desde las elecciones generales de 2004 la operación se encuentra paralizada, actualmente por diferencias entre la constructora Duch y el Ministerio de Fomento de España. A finales de diciembre de 2008 se dio luz verde al proyecto ‘Operación Chamartín’, se construirán 16.000 viviendas, de las cuales 4.000 serán de protección oficial, las obras terminarán en doce años.
El Pleno del Ayuntamiento de Madrid aprobó este viernes, con los votos a favor de PP y PSOE y la oposición de IU, el Plan Parcial de Prolongación de la Castellana, comoncido como “Operación Chamartín”, cuya inversión asciende a 11.100 millones de euros.
El Plan Parcial de Reforma Interior del Área Prolongación de la Castellana, es decir, la Operación Chamartín, ha recibido esta mañana el sello definitivo: la aprobación del pleno del Ayuntamiento de Madrid, último trámite administrativo antes del inicio de las obras de la futura ciudad financiera de la capital. Se trata del mayor proyecto urbanístico que se realizará en la capital en los próximos 30 años y se espera que sea uno de los motores económicos de la ciudad y que sirva para recuperar las depauperadas cuentas municipales. Ha votado a favor PP y PSOE y en contra IU, que lo considera “un pelotazo” urbanístico. El alcalde, en contra de su costumbre, ha intervenido al final del debate para decir que el Ayuntamiento “corona hoy el trabajo de más de 20 años” con el acuerdo en materia urbanística más importante de la legislatura y con un proyecto que “va a modificar el futuro de los madrileños”.
La delegada de Urbanismo y Vivienda, Pilar Martínez, explicó que la prolongación de La Castellana va mucho más allá de la puesta en valor de los suelos patrimoniales ferroviarios y de la reestructuración de las infraestructuras del ferrocarril en esa zona de la ciudad. “El plan parcial ha diseñado los elementos para una estrategia urbana destinada a la creación de la nueva City de Madrid”, destacó Martínez, quien aseguró que la iniciativa dará lugar a un incremento en la actividad económica de la capital y favorecerá un cambio en su especialización productiva.
El plan reasigna las cargas infraestructurales a los propietarios de suelo y permitirá cubrir la M-30 en el tramo que discurre desde el hospital La Paz hasta la carretera de Burgos.
La iniciativa permite la prolongación de la Castellana como eje estructurador de la ciudad y la creación de una nueva centralidad periférica referente de actividad económica, equipamientos y transporte. Supone también una reducción de la barrera ferroviaria y su impacto ambiental sobre los barrios colindantes.
La delegada de urbanismo señaló que han hecho falta veinte años “para poner orden en un proyecto cuyo modelo de gestión era lesivo para la ciudad y para los intereses de los madrileños y de los contribuyentes”.
Por su parte, el portavoz de IU, Ángel Pérez, subrayó que las infraestructuras generan empleo si hay una economía dinámica, si hay capital o inversiones de calidad, cosa que no ocurre con este proyecto.
Sin embarbo, David Lucas, portavoz del PSOE, afirmó que el plan municipal va a hacer de Madrid una ciudad más competitiva y comercial.