Etiqueta: Juan Palomar Verea

  • El equívoco de las zonas “exclusivamente residenciales”

    por Juan Palomar Verea Para mucha gente la calidad de vida tiene que ver con vivir en una casa que esté entre puras casas, entre más grandes mejor. A esto lo conocen como “exclusividad”. Y lo es. Tales lugares se excluyen de la verdadera vida urbana, del intercambio de saludos, pareceres y productos que por…

  • Contra el populismo arquitectónico (y urbano)

    Por: Juan Palomar Verea Para empezar, una declaración de principio: la arquitectura incluye al urbanismo. No son –como a veces parece estar de moda- disciplinas distintas. Basta repasar a los tratadistas clásicos –en su teoría y su práctica- empezando por Vitrubio y Paladio. Es de sentido común: la ciudad es la casa de todos, y…

  • Una casa de la infancia

    Juan Palomar Verea ¿Por qué habría de venir al caso esta solicitud para tratar bien una casa que encierra recuerdos personales en una columna dirigida al público? Por lo que dijo G.K. Chesterton: Si uno no está dispuesto a romperse el alma por los lugares en donde transcurrieron sus primeros recuerdos de infancia, entonces ¿por…

  • Por la Escuela Basilio Vadillo

    Por Juan Palomar Debe preservarse. Es una de las instituciones educativas más significativas de la ciudad. Por sus aulas ha pasado una impresionante cantidad de alumnos, muchos de ellos ciudadanos notables de Guadalajara y de otras partes. También ha habido una muy apreciable tradición de maestros. Es una parte esencial del funcionamiento y del carácter…

  • La llama sigue: 50 años de la Escuela de Arquitectura del Iteso (II)

    Por Juan Palomar Toda la gente tiene proyectos: trabajar dignamente o robar un banco, hacer un viaje o conquistar a una muchacha (o a un muchacho), cambiar el mundo, sembrar un bosque, vivir contento. El proyecto arquitectónico se atiene a sus propios principios. Muchas veces la pretendida sofisticación de ciertas tendencias, las bobas modas de…

  • Para usar las azoteas

    Por: Juan Palomar Son lugares privilegiados: se ve el cielo. A veces también el vecindario, el barrio;  a veces inclusive hay vistas más largas sobre monumentos cercanos o lejanos, sobre grandes arboledas, sobre los cerros que rodean a la ciudad, si hay suerte sobre el farallón del Mexicano que está del otro lado de la…